EL ABC tiene un problema gordo, y es que cuando toda tu artillería (la suya en este caso) se sitúa en la extrema derecha, ves el mundo entero de color rojo. Eso le ha pasado a Edurne Uriarte con Aitana Sanchez Gijon, de la que quizá envidie el que le haya robado el favor del plasma mediático durante quince minutos, y haya sido en esa parte roja del mundo. Casi toda, que es como ve el ABC ahora la vida. Aitana representa lo que quizá quiso Edurne que fuera la primera mitad de su vida, pero se quedó en una gonzalona de andar por casa con tacones. Todo para camelarse a un sociólogo calvo y pasado de revoluciones, no precisamente políticas. En realidad la cabeza de ambos se podría calificar más bien como una autentica involución peluquera. Del calvo al negro y sin probar el atún, la cosa la veo muy poco clara, en estas uniones de covachuelistas del exito, pagado tan fácil.
El ABC tiene un problema Gordo, porque ha metido al partido de los Gordos en casa, y esos engordan aun más en casa ajena, y luego no hay quien les saque por la puerta. Gregorio Gordo es lo más grueso izquierdistamente hablando que ha podido meter el ABC en su casa. Aunque para eso tiene a Angelito Pérez, para pincharle el culo con su florete, y así conseguir desincharle. El ABC, no sabe lo que hace, metiendo tres o cuatro izquierdas unidas revirados, como gargantas profundas de su redacción. Cualquier día puede salir otro que les pague más. Como hacía Moral Santín con los alquileres de Libertad, esa Libertad tan fea como un pecado que se buscó. Más fea y horrible que una maldición gitana, que un zurullo de cochino mal cebado.
Pero el ABC es así, lo lleva en los genes. Cuando vino la república se volvió reypublicano, y cuando vino la guerra el ABC jugó a los dos bandos. No fuera a ser que perdiese uno. Ahora tiene dentro a los compinches cómplices, por silencio culposo como mínimo, en el asunto de CajaMadrid. Mientras el periódico informaba de ello con la boca pequeña, para que no se le escapase con voz muy fuerte un nombre amigo, ya estaba planeando meter a sus amigotes (chicos para todo, hijoputas anti hijoputas) de la izquierda, a los que sus amos de los bancos pagan los alquileres. Así se fabrica un Gonzalón, un Leguina, Solanas, Serras, Cebrián, una cueva de Guerritas, un Sánchez, un Madina, ¿un Gabilondo?, una Edurne, un Dragó, un Amando, un Alonso de los Rios, un Pérez Henares, un etc interminable, un PSOE Socio liberal neocon. Neomalconservado.
Esa es la libertad que defienden en las quintas y los quintanares, una libertad más fea que un pedo mal tirao. Con pelo de estropajo y con boca de haber parido solo amargura. Libertad La Black, es la libertad del ABC. Por eso la ponen luego de cara a la pared de rodillas, porque ABC nació ya con el gen de valla de Melilla trinchanegros africanos. Libertad no quiere ser igual que nadie, quiere ser la libertad de los quintos, quintanares, de las quintas, de las rorros, quiere ser el aya de una reina futura, que tiene muy poco futuro, mientras el papel de water se fabrique con los restos del ABC.
Venezuela, aquí tienes tu papel de water, BASTO, BRONCO Y BARATO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario